Participación de niños y jóvenes como entes activos en la cultura y el arte en la República Dominicana

Gracias al Sistema Nacional de Escuelas Libres y al apoyo que ha recibido el proyecto a nivel nacional, nuestros niños y jóvenes ya no sólo son parte del público espectador, sino que se han ido constituyendo en entes creadores de cultura en las diferentes disciplinas artísticas que abarca el sistema. La importancia de la integración y la participación del ser humano a temprana edad en proyectos culturales y educativos garantiza las bases y el fortalecimiento del arte y la cultura en las nuevas generaciones y promueve el surgimiento de nuevos artistas.

La capacidad transformadora del arte es innegable; y las oportunidades que éste puede general a nivel social y económico son muchas en sociedades como la nuestra donde aún nos falta mucho por avanzar. El arte forma parte de todo cuanto nos rodea. No importa hacia dónde dirijamos la mirada, éste está presente en cada una de las creaciones humanas como un reflejo del desarrollo creativo y técnico del hombre.

El arte no tiene por qué ser aburrido. Enseñar a otros despierta ese lado creativo que a veces desconocemos en nosotros mismos. Como maestros, de alguna forma les estamos transmitiendo a nuestros estudiantes no sólo conocimiento a nivel teórico-práctico para que desarrollen sus habilidades y destrezas, sino un poco de la pasión y el amor que sentimos por mismo. Es fundamental guiar a los estudiantes hacia la búsqueda de su identidad personal y al descubrimiento de un posible artista; al final esto será lo que los guiará a la parte más difícil a la que todo artista debe enfrentarse… alcanzar un estilo propio y diferenciador dentro de las artes.

El dibujo y la pintura son invención y evolución, un constante descubrimiento de lo que nos rodea. Es ver más allá de las formas que definen las cosas a nuestro alrededor, es aprender a ver con nuevos ojos, es  reinterpretar lo que ya conocemos y darle un nuevo sentido. Eso lo hace único, divertido y fascinante. Uno nunca termina de aprender nuevas cosas; de sorprenderse con la belleza encerrada en la simplicidad de aquellos elementos que forman parte de nuestro entorno y al mismo tiempo de la complejidad de la historia que ellos nos cuentan. Es una constante evolución del conocimiento en el proceso de retroalimentación, inventiva y creatividad.

Apoyar a todos esos niños y jóvenes con inclinaciones artísticas es un deber de todos y cada uno de nosotros, padres, maestros y la sociedad en general.